Transformers: The Dark Side of the Moon

Transformers: The Dark Side of the Moon (El Lado Oscuro de la Luna), dirigida por Michael Bay y producida por Steven Spielberg, distribuida por Paramaunt Pictures y Dreamworks Pictures.

En esta tercera entrega del señor Bay, como de costumbre, una serie de peleas robóticas de alta y borrosa calidad entre los Autobots, aun liderados por Optimus Prime, y los Desepticons, liderados en un principio por Megatron y consecutivamente por Sentinel Prime (Spoiler). Además de una dosis bien asquerosa de cursilerías humanas, proporcionadas por Sam Witwicky (Shia LaBeouf) y su nueva novia Carly (Rosie Huntington-Whiteley )… exactamente, ya no es Mikaela Banes o como todos la conocemos: Megan Fox. Si si, un ultraje súper escandaloso, pero bueno nadie le habla feo al director y se va impune, la prueba de todo esto es esa mujer que fue feamente remplazada por una modelo inglesa de 1.75 (Ya verán como Shia no le llega ni a la nariz) pero tal vez era algo necesario por el bien de la historia… o no. No se puede quedar atrás el Doctor Shepard, si, el de Gry’s Anatomy que es el nuevo chico malo que le quiere vajar la novia al protagonista

Como es usual veremos una serie nueva de automóviles, bonitos y lujosos automóviles, transformándose increíblemente. Como el nuevo Ferrari 458 Italia llamado “Dino”, el Mercedes-Benz: W212 llamado “Wheeljack”, hasta un Chevrolet Corvette Stingray Concept llamdo “Sideswipe”  o el trio de Impalas “Leadfood, Roadbuster y Topsin” y los ya conocidos Optimus Prime un Peterbilt 379, Bublebee el Chevrolet Camaro que todos quieren, Ironhide el TopKick GMC, Ratchet un Hummer H2 y Wheelie el pequeño auto a control remoto que captura Mikaela en la segunda parte de Transformers con su nuevo compañero Brains un monitor TFT (Transitor de película fina).

También veremos Desepticons nuevos y súper genialosos como el lujoso Soundwave un Mercedes SLS AMG, Laserbeak que para nada es un auto sino mas bien un “cóndor” que aparece bastante a lo largo de la película, Shockwave y Driller que claramente verán en la película, aunque uno sea un robot “X”, no importa el otro es un espiralote gigante que se come los edificios y hace cada barbaridad. Además de estos Megatron (Cisterna Black), Starscream(F-22 Raptor) y Barricade (Mustang Sallen).

El realmente nuevo y locochon auto poderoso por su “fua” extremo es Sentinel Prime un Rosenbauer Pantera como camión de bomberos. Un Prime anciano loco que quiere conquistar al universo… en pocas palabras un robot senil, con la voz en ingles de nada mas y nada menos que Leonard Nimoy o como todos lo conocemos Spock.

Pasando a la película en general; es  buena, siempre y cuando te gusten los autos, las peleas de autos y una que otra cursilería entre humanos. Más allá de esto, esta película nos muestra uno de los panoramas de lo que podría ser el fin del mundo con un principio medio chafa, es decir, el alunizaje del Apolo 11 para “tapare” el hecho de que una nave alienígena se estrelló y lo de siempre Estados Unidos y Rusia peleándose por ver quien tiene naves mas “acá”. Ya sabemos que Rusia es súper pro en ese aspecto. Realmente un principio un tanto largo pero necesario para explicar una amplia parte de la trama.

No sé si realmente habrán cortado la película o si fue el que a mitad del discurso inspirador de Optimus el audio murió, pero me pareció muy mal editada. Quien sabe, tal vez tenga que verla en otro cine y esperar a ver cosas que no vi… y verla en ingles porque en español no funcionan las graserías ni los chistes, si es que hubo. En todo caso había cosas que no concordaban, como al final de la película cuando Sam y Carly están abrazados diciendo que se aman y lo de siempre. Cuando enfocan a Carly sus manos están rodeando el cuello de Sam y están extrañamente limpias, pero cuando enfocan a Sam las manos de la rubia están sosteniendo su carota y están puerquísimas. Cosas como esas no me dejan dormir en paz.
Algo que si me haría dormir seria verla en 4D ¿Lanzaran aceite cuando los robots aparentemente sangran?, ¿Caerán sesos y restos de humano desintegrado en tu cara?, ¿Tuercas y concreto volando?, ¿Sudor y humo?... espero que todas las anteriores.

De nueva cuenta los efectos son, en su mayoría buenos, pero tal vez si hubieran usado un muppet en vez de digitalizar al joven Witwicky  cuando esta prensado del ojo de Starscream todo hubiera estado mejor y un poco a los militares cayendo con sus disfraces de ardilla voladora entre los edificios, que si me preguntan se ven un poco pegadotes cuando hacen tomas en la ciudad destruida.  De ahí en fuera las explosiones quedaron bien, los robots y sus trasformaciones también… bien ahí.

Y bueno, que si lloraron en Harry Potter cuando se murio Dobby, pues prepárense porque en esta tercera edición mueren algunos autobots de los que, hay que aceptarlo, uno se encariña con el tiempo. Ironhide, Wheeljack que aun que es nuevo es un simpático viejito se petatea feamente y casi Bumblebee, en verdad si ese robot moría, iba a haber un mar de lágrimas. Sin contar a la infinidad de seres humanos reducidos a huesos. Bastante fea y divertida la situación.

El soundtrack con Linkin Park una vez mas a la cabeza con Iridescent , además de My Chemical Romance (The Only Hope for Me is You), Paramore (Monster) y Skilled (Awake and Alive) son algunas bandas que lo conforman. Los soundtracks de películas de este estilo suelen ser muy buenos, aunque este último me parece que pudo haber dado mas. Pero venga, la mayoría es banda sonora así que no se podía esperar mucho.

Así es, una película buena comparada con la segunda y tal vez con la primera, definitivamente mucho más larga que sus antecesoras. Emocionante hasta cierto punto y entretenida hasta que la secuencia del edificio callándose llega demasiado lejos y como cualquier largometraje de ficción con un mensaje muy importante: Si los extraterrestres automovilísticos quieren traer su planeta  al nuestro, hazte a un lado y deja que una chica sexy, su novio no tan sexy como ella, una bola de militares y algunos aliens aliados se encarguen de todo. Al final ellos van a ganar… bueno, eso si vives en Estados Unidos de América, donde todo sucede.

Magdiel Diaz